Una "prueba de detección de fugas" -o prueba de polvo de colorante fluorescente- es una práctica común utilizada para ayudar a las instalaciones cuando se encuentran con problemas de emisiones. Es posible que ya haya aprendido por las malas que unas cuantas fugas en las mangas de su colector de polvo pueden provocar un aumento de las emisiones que puede afectar a su capacidad para cumplir la normativa medioambiental. Las pruebas de fugas pueden identificar con precisión las mangas filtrantes que han fallado o descubrir una brecha entre el pleno de aire sucio y el de aire limpio en su sistema de filtros de mangas. A menudo son difíciles -o casi imposibles- de identificar y localizar correctamente a simple vista. Los fallos de las mangas filtrantes de tejido pueden deberse a muchas causas, como un ajuste incorrecto de la manga, orificios de chispas, abrasión, excursiones térmicas o condiciones químicas en la corriente de gas, por nombrar algunas.
Conozca a continuación 10 consejos para las pruebas de detección de fugas y por qué las pruebas de detección de fugas son una parte fundamental de un programa de mantenimiento preventivo de filtros de mangas.
